Que se yo, tengo que escribir, siento que tengo que hacerlo. Pones un titulo al post y tenes que arrancar, meterle, hacerlo, eras bueno, o por ahi, blogueando, si se permite el verbo. Reventar los dedos en el teclado, porque una especie de ansiedad te lo pide. Corres, con los dedos, hacia algun lugar, pensas, sobre que verga escribo. No piensas demasiado, escribes. Te acordas, Luquitas te dijo una vez, cuando ser bloguero K era una masa, cuando eramos unos talibanes que bancabamos esto, proyecto nacional, popular, democratico, que por Santiago del Estero no llego, no como te gustaria, no sabes ya, ni siquiera eso. Volve, no te vayas cabecita atrofiada, volve. Lucas te dijo que escribas una cancion, que solo los enamorados ibamos a tomar La Bastilla, que solo con amor ibamos a hacer la revolucion, que solo organizados cogeriamos, ejem, haremos el amor todos, y todas. Y escribis sobre esa cancion que nunca escribiste, y que pensas que estos dias que vivis son el momento indicado